Este virus traicionero está haciendo que muchas personas fallezcan antes de tiempo, pero también vemos cómo gente querida va sanando.
Y dentro de tanta desolación la vida continúa, como su propio nombre indica, porque si no fuese así, no se llamaría vida.
Hace una semana, vino al mundo un bebé precioso. Al que sus padres sabiamente, dicho sea de paso, han puesto por nombre David.
El ha decidido venir antes de tiempo, como sabiendo que si llegaba más tarde, habría mayor caos en el hospital y ni a su mamá ni a él, les podrían atender como se merecían.
Un bebé valiente, enfrentándose a su propio Goliat. un bebé que el día de mañana podrá contar a sus amigos que nació en plena pandemia mundial.
Un bebé que tan solo con su presencia ha conseguido derrotar al gigante.
Un bebé que tan solo con su presencia ha conseguido derrotar al gigante.
Porque nuestra existencia es así, está llena de momento tristes, pero también de otros maravillosos. Nuestra mejor opción, es aprender a nadar entre ellos y evitar que sus olas nos arrastren.
Como la vida está llena de sabiduría, siempre nos da un poco de quietud.
Paula CRuZ Gutiérrez.
2 comentarios:
Precioso
Gracias🙏💕
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